Poda de Rosal: porte bajo
La poda de rosales es uno de los cuidados más importantes que estas flores necesitan, para así crecer fuertes y sanas.
Pero ¿SABES TODO LO NECESARIO? A continuación, te damos unos consejos generales:
Época de poda
La época de poda varía en función de la zona climática donde estemos. Para zonas cálidas, podemos realizar la zona a partir del mes de noviembre, en cambio, en zonas frías se producirá en febrero o incluso en marzo, cuando ha pasado el riego de heladas fuertes, ya que con la poda se estimula la brotación de las yemas y si hay heladas posteriores se quemarán los brotes germinados.
Frecuencia de poda
Los rosales son plantas que florecen en la terminación de las ramas del año, esto quiere decir que en las ramas de años anteriores no florece, de ahí la importancia que podemos los rosales anualmente.
Que podar
Tenemos que dejar el rosal abierto, en forma de vaso, para favorecer la entrada de luz y de aire en toda la planta. Esto es muy importante para asegurarnos del buen estado sanitario de la planta.
Dependiendo de cómo nos guste el porte del rosal (alto o bajo) dejaremos más o menos yemas (veremos un ejemplo para dejar el porte final de unos 50-60cm.)
Poda paso a paso
Empezaremos eliminando las ramas secas, rotas, enfermas, debilitadas, etc. Continuaremos quitando las ramas que estén entrecruzadas y las que estén orientadas hacia dentro.
Una vez eliminadas estas ramas, pasaremos a elegir que ramas quedamos, optando por las que sean más jóvenes, robustas y estén mejor orientadas dándole la forma de vaso que dijimos anteriormente.
Las ramas que hayamos mantenido las vamos a podar quedándolas a 3 o 4 yemas, dependiendo a la altura que queramos que nos quede el rosal.